Mantener a los estudiantes comprometidos no es siempre fácil y en la educación virtual puede llegar a ser un proceso aún más desafiante, ya que los docentes no pueden guiar a los estudiantes personalmente, apoyarlos en las áreas en las que están teniendo dificultades u ofrecer actividades adicionales a los que terminan rápidamente, esto puede derivar en que los estudiantes abandonen el proceso de aprendizaje porque lo encuentran muy desafiante o muy aburrido.
Y aunque hay gran variedad de formas de contrarrestar este escenario, una de las más efectivas es la de crear un entorno virtual de aprendizaje atractivo que facilite la retención de los estudiantes, y contribuya a una cultura escolar creativa, que aumente el compromiso de los estudiantes con su proceso de aprendizaje. Hoy te mostramos 6 prácticas efectivas para crear ese entorno virtual de aprendizaje.
Realiza actividades, rompe hielo
En la educación presencial los docentes suelen comenzar sus cursos con actividades para romper el hielo y crear un ambiente participativo, en la educación virtual no tiene por qué ser diferente, y las actividades rompe hielo pueden convertirse en tu mayor aliado para comenzar a crear un entorno virtual de aprendizaje participativo.
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Motiva a tus estudiantes a establecer metas personales y grupales
Si los estudiantes saben desde el inicio del curso cuál será la estructura y qué van a aprender en él, estarán más comprometidos con el curso como tal. De igual manera, puedes construir junto a ellos objetivos adicionales para el curso, que los hagan sentirse más involucrados en su proceso de aprendizaje.
A la par de los objetivos generales del curso y los posibles objetivos grupales, es importante que motives a tus estudiantes a que identifiquen los objetivos personales que quieren alcanzar con el curso y se comprometan a alcanzarlos.
Realiza retroalimentación constante a tus estudiantes
En la mayoría de los casos, la participación en los cursos suele comenzar bastante alta, pero a medida que pasa el tiempo, los estudiantes van perdiendo interés en el curso. Una forma de evitar esta situación y lograr que el compromiso de los estudiantes sea una constante es a través de la retroalimentación.
John Hattie, gurú de la educación, afirma que “la retroalimentación es una de las influencias más poderosas en el aprendizaje y los logros” Pero, asimismo, la retroalimentación puede generar reacciones tanto positivas como negativas, por eso, es importante que siempre cuides el tono en el que haces la retroalimentación y el tiempo en la cual la realizas para lograr un impacto positivo.
Una forma de retroalimentación efectiva es el método sándwich. Esto implica “empaquetar” los puntos de mejora de los estudiantes entre sus puntos fuertes, de esa manera, se cubren todos los aspectos del proceso de aprendizaje y siempre se termina la retroalimentación con una nota alentadora.
Como mencionamos anteriormente, el tiempo es clave en la retroalimentación. Siempre asegúrate de realizar las retroalimentaciones a tiempo para que los estudiantes puedan aplicarlas en las próximas actividades. En Moodle, con la actividad Cuestionario puedes configurar retroalimentaciones de las preguntas.
Crea espacios que fomenten la evaluación entre pares
Los espacios de evaluación entre pares permiten que los estudiantes aprendan de sus compañeros, interactúen entre ellos y generen un sentido de pertenencia y responsabilidad hacia el curso.
Estos tipos de espacio los puedes realizar en Moodle a través de la actividad taller o implementando un sistema de calificación en los foros, donde los estudiantes pueden calificar los aportes de sus compañeros.
Saca provecho a la gamificación
El implementar la gamificación en tus cursos virtuales no solo les dará a los estudiantes una mayor motivación, sino que les brindará una sensación de progreso.
La gamificación la puedes implementar a través de puntos, insignias u otros elementos competitivos, similares a los que experimentan los estudiantes en los juegos en línea. Sin embargo, cabe aclarar que este proceso de gamificación siempre debe estar sustentado en una estrategia de enseñanza para evitar que los estudiantes se enfoquen en el juego solamente, y olviden que están en el curso para aprender.
Construye un sentido de comunidad
Los estudiantes suelen estar más comprometidos si sienten que son parte de una comunidad, por eso fomenta espacios y actividades virtuales que promuevan la construcción de relaciones, el intercambio de conocimientos entre pares y el apoyo personalizado a cada estudiante.